Tributo a la Primavera

Ubicado en la Colonia Roma, en un edificio diseñado por Ambrosi Etchegaray, el proyecto surge de una amistad de vecinos. La pareja de clientes vivía en el departamento de abajo. Ellos, amantes del arte, la música, con una vibra moderna y romántica en su estilo de vida, fueron la inspiración para desarrollar este proyecto.

Arquitectura: Ambrosi Etchegaray.

Diseño de interiores: Estudio Panebianco.

@studiopanebianco
Ubicación: Colonia Roma, CDMX
Año: 2022.
Área construida: 670 m2.
Fotografía: Molly Zaidman.

El arte abunda en cada habitación del departamento, debido a que los dueños son coleccionistas de arte. Por ello, el departamento está dividido en dos niveles; se entra por la planta alta, donde se encuentra sala, comedor, cocina y una amplia terraza con vista hacia la Roma Norte. Bajando unas escaleras se encuentra el área privada del departamento donde hay tres recámaras con sus respectivos baños como también una sala de TV/FamilyRoom.

Se efectuó un cambio drástico en la iluminación del departamento con la ayuda de Paola José, del estudio Sombra. Se redujo casi a un 50% el número de spots llevados en plafón y fueron producidos por luminarias decorativas que emiten luz cálida y suave. La calidad de luz que transmite un candil o un arbotante es mucho más agradable que la de un spot y era justo lo que se buscaba para estos espacios de

mucha altura y volumen. Una propuesta de carpintería fue diseñada para infundir un toque tradicional en la arquitectura moderna del edificio. El diseño de molduras fue una propuesta importante debido a que ayuda a hacer más íntimas las alturas de 3,40 m, que trae la planta principal del departamento. El comedor es un área de mucha luz que se conecta con la terraza, con la cocina y con la sala principal.

Se usó muchos de los muebles que ya el cliente tenía en su colección. Se retapizaron, barnizaron e incluso pintaron aquellas piezas que podrían seguir en uso dentro del ambiente. También se usaron marcas predominantemente mexicanas y fabricantes locales. Un ejemplo es la mesa portuguesa, de Alfonso Marina. Es una pieza que por su forma es tradicional, pero al estar barnizada en un negro absoluto

genera un aire mucho más contemporáneo. También es un excelente ejemplo de la mano de obra que existe en este país. Se obtuvo una paleta de colores neutros, manteniendo la base arquitectónica en colores suaves, que permiten relucir los cuadros, los accesorios y la paleta de verdes en el diseño de jardinería. Las vistas de la ciudad traen mucho color y contribuyen a la paleta dentro de los espacios.

Cuenta con ventanas de piso a techo en casi todos los espacios, lo cual genera toda otra capa visual y colorida que también contribuye al esquema de color. Darle al departamento un look un poco “old world” teniendo en cuenta que nuestro contexto arquitectónico es absolutamente contemporáneo y dominan los materiales como el concreto y el granito. Las líneas rectas y la ausencia de detalles decorativos en los acabados fue un reto de combinar con los elementos más tradicionales que deseaba el cliente.

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