Sensibilidad caribeña

Esta villa playera asentada sobre pilotos fue diseñada y equipada para operar en la Reserva de la Biosfera de Sian Kaan, sitio catalogado de alta sensibilidad ecológica, y por tanto, carente de energía eléctrica e infraestructura para aguas servidas y de alimentación.

Proyecto arquitectónico y paisajista: reyes ríos + larraín arquitectos.
Diseño interior: Estudio Mero: Rodrigo Degetau Von Hovel / Horacio Gutiérrez Merediz.
Construcción: Fernando Abogado Mestre / Creareic.
Ubicación: Reserva de la Biosfera de Sian Kaan, Quintana Roo.
Año: 2020.
Área de construcción: 290 m2.
Fotografía: Leo Espinosa.

Las estrictas restricciones de la autoridad federal acotaron la superficie techada de construcción a un máximo de 200m2 con una huella de desplante no mayor a 33.33 metros, que es el tercio correspondiente a los 100 metros de frente de playa del predio. Ante las fuertes limitaciones logísticas que impone el sitio, la casa ha sido diseñada pensando en minimizar el consumo de energía y privilegiando el uso de materiales locales (palapa de zacate, maderas duras, estuco con sellador natural de chukum), en combinación con materiales industriales de alta resistencia a la humedad y el desgaste de uso como cancelerías de aluminio con aplicaciones de madera.

Arriba de la planta baja se encuentra el rooftop, espacio que continúa con el uso de materiales locales, al incluir una piscina de acabado chukum y mobiliario de madera que, además, permite una vista placentera con dirección al mar.

La casa se compone de tres cuerpos que definen las necesidades propias de cada componente del programa: un cuerpo central, que contiene los espacios públicos y de servicio, incluyendo una azotea con tina y un mirador panorámico que permite leer el paisaje a 360 grados, y conectar tanto con el mar como con las lagunas. Los dos cuerpos laterales contienen, al sur, la recámara principal y las dos habitaciones restantes. La estructura compositiva de los espacios define el esqueleto estructural de los mismos. De esta forma, la casa tuvo una construcción rápida y eficiente al mismo tiempo que se consiguen graduaciones contundentes de escala y privacidad en los baños con regaderas abiertas al paisaje, sin interrupciones en contraposición con las graduaciones de las aperturas de ventanas en recámaras. Todo ello, a pesar de la sencillez del esquema de organización del conjunto.

El paisaje preexistente ha sido cuidadosamente incorporado al proyecto, consolidando y restaurando las áreas implantadas por la obra, con la misma  vegetación endémica que caracteriza el lugar.