
En la región de Cheliábinsk, una residencia familiar revela la culminación de 13 años de colaboración entre la diseñadora Alena Telegina y una extraordinaria familia.

Diseño de interiores: Alena Telegina.
IG: @alena_telegina.diseño
Ubicación: Cheliábinsk, Rusia.
Año: 2024.
Área construida: Casa 380 m²,
Complejo de sauna 130 m².
Stylist: Bauer Anastasia.
Fotografía: Natalia Gorbunova.


El desarrollo del proyecto siguió un camino dinámico, iniciando con el complejo de spa para luego continuar con la casa. La preocupación inicial de los clientes sobre si la residencia principal podría igualar el impacto del spa se disipó cuando, un año después, reconocieron que la casa había superado sus expectativas. El proyecto incluso evolucionó para incorporar una terraza no planificada inicialmente, añadida tras descubrir el mobiliario perfecto durante el proceso de selección.


El complejo de sauna exhibe materiales naturales como olmo en las puertas tipo granero, paneles iluminados y vegetación estabilizada, mientras que la madera de nogal domina el área del comedor, incluyendo un exclusivo aparador fabricado igualmente por artesanos locales. En el vestíbulo, una impresionante losa de cedro natural sirve como acento central.

Uno de los mayores desafíos fue cumplir con la petición de “sorprender”, sobre todo cuando ya se conocen los gustos de los clientes. La respuesta fue crear diversas zonas que reflejaran sus preferencias: un área de comedor con sofá y sillas en tonos turquesa, adornada con románticas luminarias tipo cuentas que aportan femineidad y ligereza a la decoración. Para la zona masculina de cine, ubicada tras una división, se emplearon tonos más oscuros, con un sofá azul marino y paredes negras que crean una atmósfera íntima y acogedora.

Los materiales jugaron un papel crucial en definir la personalidad de cada espacio. El cuarzo Patagonia, protagonista del vestíbulo que conecta la sala con la terraza, fue obtenido de diversas ciudades, mientras que el gres porcelánico se importó desde Italia a través de un distribuidor en Moscú. Aunque no fue posible revisar todos los materiales en persona, el resultado final superó todas las expectativas. En el interior, la iluminación de Tsentrsvet, el yeso decorativo, los paneles hechos a mano diseñados específicamente para el proyecto y los muebles elaborados por artesanos locales crean una armonía inigualable. Todo se complementa con una consola única que se integra a la perfección en el concepto general, funcionando como un elemento decorativo excepcional.

Cada detalle, desde el rincón de yoga aéreo hasta la armoniosa mezcla de materiales naturales, habla de sus valores de comodidad, calidez y conexión familiar. Este viaje, marcado por la innovación y la creatividad, no sólo ha resultado en un hogar excepcional sino también en un testimonio del poder de la colaboración duradera entre cliente y diseñador.




