La sala es un lugar que suele utilizarse para recibir a las visitas o para fechas especiales, pero cuando tenemos pocos metros, este espacio juega un papel diferente, ya que se vuelve de uso constante. Es el lugar donde coincidimos con la pareja o la familia, ya sea para platicar o ver la televisión. Es un espacio para dormir la siesta, tomar el café; para relajarnos y ponernos cómodos para leer. Definitivamente, en un área pequeña, la sala se vuelve muy importante, por lo que debe lucir bonita, cómoda y acogedora.
Aquí te dejamos algunos tips de cómo puedes renovar o mejorar tu sala si esta tiene un espacio reducido:
1.- Usa materiales naturales como maderas y fibras
Incorpora elementos como piedra para muros o pisos, muebles de madera y accesorios de fibras naturales. Un tapete de fibra o pequeñas piezas decorativas en la cantidad justa harán la diferencia.
2.- Elige un sofá cómodo y evita la saturación
Si el espacio es limitado, utiliza muebles de otras áreas, como sillas del comedor, cuando sea necesario. Mantén los muebles pegados a las paredes para maximizar el espacio libre en el centro de la sala.
3.- Opta por luz cálida e indirecta
Crea una atmósfera acogedora con lámparas de pie, de mesa o colgantes. La luz LED indirecta, que rebota en el techo, puede ser una gran opción para darle un toque mágico al ambiente.
4.- Añade plantas para un toque natural
Las plantas son ideales para refrescar cualquier espacio. Colócalas en macetas de barro, piedra o canastas de fibra para darle un toque artesanal y natural a tu sala.
5.- Respeta las zonas de paso
Ya sea para acceder a otros espacios o para moverse por la sala. No se debe saturar el área con el objetivo de que se vea mejor; menos es más y los pasillos deben estar siempre despejados para mayor comodidad.
6.- Complementa con accesorios decorativos
No olvides los detalles. Cuadros, libros, jarrones, esculturas y un buen tapete pueden darle personalidad y calidez a tu sala.
7.- Lleva el color a tu sala
Puedes empezar con accesorios decorativos, tapetes, cuadros y cojines. Elige un solo color en toda su gama o dos o tres tonos diferentes, pero siempre dejando que uno predomine y que combinen entre sí. O incluso pintar toda una pared de color.
