
POR AMOR AL ARTE
Ana Landa / Línea Vertica
Ubicación: San Pedro Garza García, NL
FOTOGRAFÍA: JORGE TABOADA/IDEA CÚBICA
Este proyecto tuvo una petición muy especial: ser minimalista, con pocas combinaciones en el uso de materiales. Ese fue el reto, ya que el diseño espacial del departamento en obra negra, más que un espacio arquitectónicamente atractivo, fue diseñado para contemplar las vistas hacia la Sierra Madre Oriental y no para el manejo espacial minimalista.

El ingreso principal al departamento es mediante dos elevadores directos a un recibidor sencillo donde se encuentra un Buda, una larga banca y una mesa. Estos elementos dan la espalda a la hermosa montaña y están colocados sobre el dibujo en cruz de la duela de gran formato. El granito recubre los muros negros de estos elevadores y con color negro, el techo a todo lo largo del pasillo del lado derecho, provocando la primera impresión envolvente. El segundo efecto lo hace el plafón de madera hacia el área social, que remata en una escultura.
El departamento consta de recibidor, baño de visitas, comedor, sala, biblioteca, área de juego y oficina; tres recámaras completas con baño y vestidor, área de estancia familiar y la recámara principal con su anterecámara de TV, además de sus áreas de servicio convencionales. La distribución original se modificó en diferentes áreas: la entrada de servicio daba directamente a la lavandería, quedando ahora directo a la cocina en forma de un pasillo largo y funcional junto con su antecomedor.




En el área del comedor se creó un pasillo aledaño par a ingresar de las recámaras directamente a la cocina sin el paso forzado por el comedor. El área de la sala se dividió con un muro para ubicar una oficina aprovechando la hermosa vista, diseñada especialmente para cumplir con las necesidades del cliente: libreros con puertas que se ocultan lateralmente para guardar las carpetas de controles.








LA SALA PRINCIPAL ES UN ÁREA GRANDE Y CONTINUA A LA GRAN TERRAZA QUE CONSTA DE ASADOR, COMEDOR Y SALA EXTERIOR. ADEMÁS, SE INCORPORÓ LA COLECCIÓN PRIVADA DE ARTE DEL CLIENTE, LA CUAL CUENTA CON OBRAS DE LEONORA CARRINGTON, RENOIR, MORALES Y BOTERO, ENTRE OTRAS.
El family de lado derecho del pasillo negro se ambientó con un plafón de delgadas vigas de madera iluminadas indirectamente, provocando calidez e integración con el área de home office de la cliente. La zona de biblioteca aledaña a la mesa de juego está diseñada con un mueble librero indispensable para crear un ambiente de relax y lectura.








La recámara principal se dividió en dos áreas: una zona íntima de TV como anterecámara y la zona de dormir, donde el respaldo de la cama se diseñó con espejos filtra sol en formatos rectangulares contenidos en ángulos de acero, intercalando el acabado de los mismos, brillantes y opacos, con el objeto de reflejar la vista de la ciudad iluminada en la noche, mientras que los opacos brindan decoro.
El baño principal se redistribuyó en una gran zona de lavabos y tocador. El área del clóset vestidor estaba originalmente dividida en dos accesos independientes obstruyendo la vista a la montaña, se rediseñó el espacio en uno integrado y luminoso.
El ingreso a la recámara principal tiene un pequeño vestíbulo con un mueble sencillo de colores negros y grises claros, y una mesa pequeña orientada hacia una terraza íntima. Sin duda, una residencia donde se respira buen gusto y arte en todos los espacios.