
FUNCIONALIDAD Y GLAMOUR
Esta residencia enfatiza el balance entre la naturaleza, los elementos arquitectónicos y el mobiliario que realza el estilo de vida social de sus habitantes.

La Barranca es una residencia de dos plantas y unos hermosos jardines en desnivel; se buscó crear un balance entre funcionalidad y glamour para sus residentes. La planta baja cuenta con amplios espacios de uso social, con una sala y comedor principal, sala-bar y antecomedor para recibir invitados. La cocina, cuarto de servicio y lavandería se encuentran en este nivel. En la segunda planta está la recámara principal, tres secundarias y una sala de TV con un estudio. El exterior se aprecian plantas de la región, y en sus diferentes niveles se acompaña de una terraza amplia con asador, comedor, sala y fogatero, alberca y cancha de fútbol.
Los colores neutros predominan y unifican las áreas, creando así espacios que funcionan individualmente y, al mismo tiempo, pueden conformar uno solo, según la necesidad del usuario.



La selección de arte destaca por su color y por protagonizar los espacios creando un punto focal.

Los diferentes espacios de la planta baja tienden a estar conectados mediante imponentes puertas corredizas, generando espacios donde la versatilidad fue el reto más grande. Ambientes que pudieran tener, al mismo tiempo, diferentes reuniones y ser totalmente independientes, o bien, hacerlo más espacioso si se desea tener un evento más grande que no se sintiera dividido por estos elementos. La selección de arte es una mezcla ecléctica de diseño moderno-contemporáneo, que se ve reflejado, tanto en el arte con piezas auténticas de Raúl Cerrillo como en el mobiliario, con talking pieces de diferentes autores.


Los techos altos dan una sensación de gran amplitud y elegancia, además de que permiten aprovechar mucho más la luz natural. La recámara principal, privada e íntima que a su vez da espacio al paisaje insólito, que se asoma por la ventana, totalmente equipada para recrear diferentes escenas así en toda la casa.
“Es una casa llena de vida, donde cada espacio se disfruta y se vive al máximo”, Cordelia Cortés, directora de UNUO.
