
EDIFICIO INDIANILLA
Arquitectos a cargo: Andres Padilla, Daniel Padilla, Pablo Desvignes
Fotografías: Onnis Luque y Juan
Equipo de arquitectura: Luis Alberto Pineda
Equipo de obra: Luis Alberto Pineda
El objetivo del proyecto fue dotar de vida un edificio de vivienda de los años 50´s que se encontraba en abandono total, cerca de las colonias Roma Norte, Juárez y Centro de la Ciudad de México.

El principal reto fue mantener el carácter del edificio en todos sus sentidos, ya que estaba en muy mal estado.
Esto se logró mediante la restauración de elementos existentes, la reestructuración de los elementos estructurales y la reorganización de los espacios interiores, para crear espacios funcionales y adecuados al estilo de vida actual.
Hoy el edificio se distribuye en una planta comercial, en la planta baja con 40 metros de fachada y 9 cortinas comerciales, cuatro niveles de departamentos de 2 habitaciones y un último nivel con estudio, terrazas y rooftop. En general, todos los espacios cuentan con algún lugar al exterior, ya sea balcón o terraza.

El edificio se ubica en lo que antes se conocía como la colonia Indianilla, zona que hoy en día ha crecido y se ha transformando por su situación céntrica y cercanía a las colonias Roma Norte, Juárez y Centro Histórico.
La propuesta gira alrededor de hacer casas más pequeñas y accesibles, sin dejar a un lado la calidad, siempre respetando la imagen y personalidad original del edificio. Se diseñaron espacios comunes al exterior para fomentar la relación con los vecinos y establecer una comunidad de apoyo mutuo.
Para mantener la esencia y estética original, el despacho trabajó de la mano de los trabajadores y artesanos locales para conocer sobre las técnicas y materiales de la región.
El tiempo hizo evidente el impacto social en el contexto inmediato pues los habitantes han impulsado notablemente al comercio local y los espacios comerciales del inmueble han dotado de nuevos servicios la zona.
La importancia de la regeneración urbana y del reciclaje de edificios como una solución al esparcimiento de las ciudades, es una de las características del despacho. Pues hoy más que nunca, hace más sentido conservar y transformar que demoler y volver a construir. Renovar los edificios en desuso ayuda a densificar la ciudad y así aprovechar los recursos de todos de manera más eficiente.
